El próximo 1° de diciembre venció el último plazo para que obligatoriamente ingresen profesionales, unipersonales y pequeñas empresas a la facturación electrónica de acuerdo al calendario vigente.

Todas las empresas, profesionales y unipersonales que vendieron en 2018 más de 305.000 Unidades Indexadas (UI), unos 95.000 pesos mensuales, tienen como fecha límite este mes para ingresar a la facturación electrónica, ya que deben estar postulados ante la Dirección General Impositiva (DGI) antes del 1° de diciembre de 2019.

La DGI resolvió otorgar un beneficio fiscal de 80 UI + IVA mensuales (unos 322 pesos), específicamente para las pequeñas empresas.

Con el objetivo de facilitar a estas empresas el acceso al régimen de facturación electrónica, ANTEL desarrolló una alianza con Memory para ofrecer una solución que tenga como costo final cero peso al aplicar el subsidio.

El régimen de facturación electrónica comenzó en Uruguay en 2012, culminando el calendario vigente en este mes.

Las facturas electrónicas se realizan en una computadora, teléfono, POS o cualquier dispositivo con conexión a Internet y se emiten de forma electrónica.

Al poseer el mismo valor jurídico y tributario que una factura emitida en papel, las facturas electrónicas presentan una amplia cantidad de ventajas tanto para el emisor como para el receptor. Entre ellas, el ahorro de costos y una mayor eficiencia.

Beneficios de la factura electrónica

Además de evitar multas y sanciones si no se incorpora a tiempo, la factura electrónica tiene muchas ventajas frente a la facturación tradicional, ya que no tiene que ser impresa, sino que le llega automáticamente al cliente, evitando costos de impresión o envío. Asimismo, elimina la necesidad de tener libretas o papel preimpreso, así como la necesidad de guardar la copia archivada de cada factura.

A su vez, es más seguro y más rápido ya que elimina errores de precios, cálculos y simplifica los procesos administrativos.

Alianza Antel – Memory